Polo del Interior
Cuenta la historia que el comienzo de la práctica del polo en el Jockey Club de Rosario se remonta a la iniciativa de un grupo de socios del club que, que antes habían constituido el Rosario Polo Club. Fue así que en 1936, Hector Laborde, ex presidente del Rosario Polo Club, junto con el tesorero Eduardo Uranga y los vocales Horacio Fernández Díaz y Modesto Borras, gestionaron ante el Presidente del Jockey Club, Joaquín Lagos, la autorización para la práctica del polo en el predio de Córdoba y Wilde. Debido a que la mayoría de los integrantes eran socios de la Institución, la Comisión Directiva accedió gentilmente a lo solicitado. Al poco tiempo se procede a la construcción de las caballerizas y de espléndidas canchas con tablas, dos de las cuales poseían riego artificial. En 1939, se dio un nuevo impulso, al asimilarlo al Jockey Club, creándose la primera subcomisión de polo. Ese año el Jockey Club llegó a jugar en Palermo y el equipo representativo estuvo integrado por Eduardo, Roberto, Marcelo y Leopoldo Uranga.
En el año 1941 el Jockey ganó nuevamente el derecho de jugar la Copa República en Palermo integrando el equipo Roberto y Eduardo Uranga y Raúl y Miguel García Fuentes. Dos años más tarde, por tercera vez el Jockey ganó el derecho a disputar la serie de partidos de la Copa República en el Campo Argentino de Polo, en esta oportunidad el equipo estuvo conformado por los hermanos Raúl, Miguel y Roberto García Fuentes y Oscar Tricerri. Durante la década del 60 renació el polo del interior y una nueva generación de noveles polistas comenzó a competir en distintos torneos organizados por clubes amigos como Venado Tuerto, Las Rosas, Santa Fe, Pergamino y Villa María. De esa manera se fue gestando la idea de organizar un torneo anual con una fecha fija dentro del calendario nacional de polo del interior.
Así, en 1964 comienza a jugarse el Torneo Abierto“Día de la Bandera”, en la actualidad uno de los más importante del interior del país, donde se ponen en juego las copas Día de la Bandera (Abierto), Gral Francisco Vélez y Héctor Laborde (hándicap). Esos fueron los orígenes. La historia se sigue escribiendo…
Nicolás San Román, un histórico dentro de la historia
Historia, tradición, prestigio… ¡Mucho polo! Hablar del Jockey Club de Rosario es recordar un historial de competencias y campeones, con la tradicional Copa de la Bandera como máxima competencia.
Nicolás San Roman es el presidente de la subcomisión de polo del club rosarino. “Desde la década del 80 integré las sucesivas subcomisiones de polo del Jockey Club de Rosario. Con algunos intervalos, en distintos puestos, como vocal, capitán de cancha y vicepresidente. En 2014 se festejaron los 50 años del torneo de la Bandera, nuestro torneo más importante, y asumí como presidente de la subcomisión hasta el día de la fecha”, cuenta.
Con respecto al club, Nicolás dice: “Con esta pandemia que nos afecta a todos, el polo está reducido, pero me gustaría contar una breve historia del club para que comprendan lo que es el polo en el Jockey Club. El club nace en el año 1900, y en su artículo 1 del estatuto dice ‘propender al mejoramiento de la raza caballar en la República Argentina’. Esto lo cumple el club mayormente con el turf, ya que al poco tiempo tiene su hipódromo. En el año 1913 se empieza a jugar en el óvalo central del hipódromo al polo. Eso ocurre con algunos intervalos hasta el año 1924, desde el año 1937 se empieza a jugar en el country del polo, y en los primeros años de la década del 90 se forma la primera subcomisión de polo del Jockey Club de Rosario. El club cuenta con dos canchas reglamentarias, con tablas, con un clubhouse con vestuarios y un palco con vista panorámica a las dos canchas, con unas caballerizas con galpón, 24 boxes, corrales techados y al aire libre, con una capacidad para 250 caballos”.
Jockey Club de Rosario: polo más historia.
Nicolás San Román por dos: en una entrega de premios y en una vieja postal jugando
Dos objetivos: escuelita y torneos
“Yo comencé a jugar al polo en los campos de la familia, en los alrededores de Rosario, junto con hermanos, primos y amigos. Hacíamos lo que se llamaba polo de estancias. Más adelante, cuando empecé a trabajar en el campo, me vine a vivir de nuevo a Rosario y empecé a jugar en el Jockey Club de Rosario, al cual pertenece mi familia desde sus orígenes”.
Así recuerda Nicolás San Román sus inicios con este deporte que forma parte de su vida desde hace mucho tiempo. Hoy la vida lo pone en una situación complicada, pero se nutre del pasado con las metas futuras siempre claras.
“Los objetivos para el crecimiento del polo están fundamentados en dos intereses: la escuelita de polo por un lado, que está llevada adelante por una profesora con el título de instructora dado por la AAP, y por otro lado el programa de torneos que tenemos a lo largo del año. Desarrollamos temporadas, una de otoño con 3 torneos, culminando con el tradicional torneo del Día de la Bandera. La temporada más larga, con 6 torneos, forma parte de la Liga Santafesina, algunos de ellos, y el Rosario Polo Festival, que interactuamos con todos los clubes de la provincia de Santa Fe y que tiene como resultado final jugar en Palermo en torno al programa de apoyo al polo del interior que tiene la AAP. Contamos también entre los socios con dos referís profesionales de la AAP, que todo eso ayuda a levantar y jerarquizar el nivel de polo”.
Nota ClickPolo #427 - Lunes 10 Agosto
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