Una máquina diseñada para ganar y batir la mayor cantidad de récords posibles. Con un juego que de a ratos roza la perfección. Eso es La Dolfina
Un equipo armado a comienzos de año y rearmado cuando la temporada ya galopaba. Con un juego que fue creciendo partido a partido hasta llegar a su punto más alto. Eso es Las Monjitas.
Una organización milimétrica, con cada detalle pensado para acertar virtudes y disminuir defectos. Eso es La Dolfina.
Una organización de años que siempre trabajo para llegar a lo más alto en Argentina, pero nunca había podido. Con Camilo Bautista como mentor, esta vez se le dio. Eso es Las Monjitas.
Un equipo que lleva cinco títulos seguidos en Palermo, pero que quiere más. Formado por cuatro jugadores que sin insaciables a la hora de levantar Copas. Y que se muren por ganar una vez más. Eso es La Dolfina.
Un equipo con tres debutantes en la final de Palermo (Sola, Caset y Toccalino) y un jugador que disputó una definición (Ulloa, en 2013). Que tiene cuatro jugadores que se desviven por ganar Palermo. Eso es Las Monjitas.
Son La Dolfina y Las Monjitas, dos razones distintas para buscar la gloria. Bienvenidos a la súperfinal de Palermo 2018.